
El Ministerio de Medio Ambiente ha comprado, literalmente, cinco fincas del litoral asturiano para salvaguardar su valor natural de la especulación inmobiliaria. Todo un acierto.
Lástima que Narbona & Company sólo hagan estas cosas en el norte, mientras permiten que en el sur se siga vendiendo la costa al mejor postor. A ver si compra las fincas forestales aledañas a la costa de Doñana, sobre las que ya se diseña en la oscuridad una Marbella onubense que nos deje sin playas vírgenes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario