Un estudio de la Universidad de Huelva en estrecha colaboración con un hospital público andaluz, el Juan Ramón Jiménez, ha demostrado la existencia de URANIO 238 en obreros del polo químico onubense.
Ya los ecologistas llevaban lustros diciéndonos que en las escombreras industriales de Huelva había radiación. Greenpeace hizo mediciones varias veces en las balsas de fosfoyesos demostrando que había altísimas dosis de uranio (superiores hasta 30 veces a las máximas permitidas al aire libre).
Y ahora son organismos públicos los que vuelven a demostrar que la mafia química de Huelva lleva décadas soltándonos elementos de radiación nuclear a la atmósfera y al entorno.
El estudio se ha hecho a 125 trabajadores voluntarios de las 8 provincias andaluzas. En las otras siete provincias, ninguno tenía índices de radiación. De los 32 trabajadores analizados en Huelva, 14 tenían URANIO 238 en sus uñas.
¿Permitirán por fin las consejerías de salud y medio ambiente de la Junta hacer un estudio mas exhaustivo sobre el grado de contaminación radiactiva en Huelva?
NO, NO Y NO.
Van a buscar excusas a este estudio, maquillar estos resultados y levantar otra cortina de humo.
Ellos viven en sus palacios sevillanos, no en la obrera Huelva.
(en la foto, un miembro de Greenpeace caminando por las balsas de fosfoyesos de Huelva, donde está demostrada radiactividad superior en mas de 30 veces al máximo permitido)
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